Y NO ME LLEVO NADA POR LA PROPAGANDA.

Tras este breve paréntesis retomo la escritura de este blog con un par de instituciones de las que ya he hecho referencia en los post anteriores. Efectivamente, tal y como puede comprobarse en las imágenes adjuntas se trata de Marcelino Textil y Bazar el Olivo, este último un verdadero Corte Inglés del Guardia Alumno.

Si no recuerdo mal, pues la memoria es selectiva y borra lo accesorio, los miércoles en el REGA aparecía el representante de Marcelino Textil, con el fin de ofertar aquellos uniformes de faena pintones que no picaban y que se parecían a los del GAR, lo suficiente para que pipiolos ilusionados como nosotros picaran y encargaran el suyo. Yo, personalmente, lo hice porque no aguantaba el picor del uniforme que nos daban, me costó diez mil pesetas del ala y (mi primer traje a medida, por cierto), a día de hoy está en el armario impoluto, eso sí, tal y como me ocurría con el de bonito, no me entra ni en la oreja. Los instructores lo tenían todos y los Profetas también picaban. Por lo menos me ahorré los sarpullidos de aquella tela de fibra infame.

Del Bazar el Olivo, que en la actualidad se ha pasado a la sociedad de la información con página web y todo, que decir: lo mismo pillabas un bocata de tortilla que unos grilletes Alción último grito.Recuerdo que en la segunda planta del bar había una estupenda colección de banderines de las sucesivas promociones, así como una buena representación de tricornios y cubrecabezas de todas las épocas. No podía faltar la carterita con chapita de rigor y por supuesto todo tipo de cosas "frikies" para llevar a la familia. Lo que comenzó siendo un pequeño bar frente a la Academia, ha acabado cotizando en bolsa, en el índice de industriales...

En cualquier caso creo que ver este par de anuncios os traerá todo tipo de recuerdos.

Ya he ido recibiendo correos de compañeros de toda la geografía nacional y, ojo, internacional también. Prometo ir contestando a cada uno, pero os vuelvo a implorar historias, fotos, ideas y experiencias de todo tipo para ir construyendo este pequeño espacio de nostalgia. No os perdais los regalos que ofertan los anuncios que son el "top ten" de la tecnología de la época.